San Juan Bautista

San Juan Bautista
Mostrando las entradas con la etiqueta poesía. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta poesía. Mostrar todas las entradas

sábado, 12 de abril de 2025

La Octava Palabra - Antonio Caponnetto

 



LA OCTAVA PALABRA

 

«Todo lo hace bien. Hasta puede hacer que los sordos oigan y que los mudos hablen!».

Marcos 7, 31-37.

 

No la escuchó la turba arrebañada,

ni menos los verdugos inclementes,

no tampoco los gritos de las gentes

en la fiesta macabra, ensangrentada.

 

No se hizo audible para el fariseo,

ni para Judas que al contar su plata,

sordo de culpa se buscó una reata

y halló el lugar de su horca, como un reo.

 

Retumbante de hiel, la Sinagoga,

indescifraba el sacro abecedario

que aquel excepcional patibulario

desgranaba en la cruz mientras se ahoga.

 

¿La notaron de lejos los rabinos,

Poncio Pilatos y Caifás el torvo,

o esa tipografía era un estorbo

para sus corazones asesinos?

 

No prestaron oídos los quebrantos

lejanos de sus fieles pescadores,

en la hora final, los estertores

cubrieron los sonidos como mantos.

 

Cuentan que Dimas sí, la oyó potente

cual una despedida o un legado,

brotada desde el agua del costado

mas proferida con su voz doliente.

 

Letra por letra le llegó a María.

La septiforme espada de su duelo

acaso se alivió como un consuelo

en una inmensa, cósmica agonía.

 

Magdalena entre llantos presta oídos

y percibió un fraseo algo lejano,

era Jesús, su Dios y su hortelano,

eran sus labios secos, doloridos.

 

Refieren unos de un papiro griego,

(hallado adentro de una gris tinaja)

de una mujer que oyó, ya cabizbaja:

La Vera Icón, la del clemente pliego.

 

Conjeturo que entonces, Juan, el hijo,

discipular retrato del amado,

cuando ya todo estaba consumado

desentrañó el particular sufijo.

 

El Señor con sus ojos todo abarca,

con sus miembros clavados todo estrecha,

así lanzó su postrimera endecha:

¡Pedro, sé fiel al conducir mi Barca!

 

 

Antonio Caponnetto






jueves, 23 de enero de 2025

Didáctica del Hogar - Antonio Caponnetto

 

Didáctica del hogar1

Hoy, 23 de enero de 2025, ante la noble iniciativa de un haz de amigos de revivir la antigua y olvidada Festividad de los Desposorios de la Santísima Virgen y San Joséconsiderándola como el Día del Matrimonio Católico, traigo a colación estos versitos que escribí hace unos años.


-I-

Cuando llegue la noche de merecer tu alba,

de amanecer ceñido a una mano convexa

y cóncava la tuya

busquen ambas los frutos de entrelazar pilares o misiones.

Cuando sea el instante de las eras trilladas

cercanas a un cortijo, protector de las lluvias,

empedradas de lajas,

y te lleven las eras a desafiar los vientos

por la mujer que amas.

La has de buscar irrepetible y única

en dos lares.


-II-

Si fuera en la ciudad, que no sean caínes

sus pobladores hoscos,

ni siquiera los prófugos de esa edad del herraje

que entrevieron los versos de Hesíodo el profeta.

Si fuera en la ciudad

lo repito en tu cara:

encuentra los penates fundadores

-la ojiva, el arbotante, el altar, el cañón o la lanza-

Es seguro que cerca de estos manes añejos

Ella te aguarda firme como roca en la cumbre.


-III-

Si buscaras acaso en el prado o la huerta,

en la dehesa, tinaja del verdor o el rocío

que acumula la aurora

y las primeras luces acompasan.

Redúcete a un terreno cabalgado por potros,

jineteado a talones de praderías bravas.

Ten por cierto que entonces

en el terruño virgen de las ruedas mecánicas

Ella te aguarda sola para salirte al paso.


-IV-

Metrópoli o campiña, lo que elijas al filo

de tu predilección pensada

y tu gusto jerárquico,

procurarás que ría en la primera cita.

Pero que cada son del regocijo sea un laurel ganado

a la Reina Alegría

y no un visaje esclavo de aplebeyadas muecas en tus brazos.

Que ría con el cosmos que se agita e inmóvil

permanece en sus ciclos anclados al Eterno

que dispuso su ritmo.

Quede en su falda un poncho que le diste al sereno,

era tuyo y ahora lo conquistó su gala.

Y fue la tarde y la mañana de la primera cita.


-V-

Leopoldo, me dirás lo que todos preguntan

sin saber la respuesta.

Mas yo tengo la mía.

Lo que interroga unánime el varón en sus trece

es si existe una clave, un secreto, una cifra

para advertir que es Ella tu costilla por siempre.

Te prometo certeza en mi triple respuesta

como la de un clavicémbalo en la Corte de Arturo.

No diré veredicto de jueces infalibles

pero si la sentencia del que ya ha envejecido.


-VI-

Han de aprobar inicialmente ambos el ejercicio

que reprobaron siempre

Calixto y Melibea en múltiples espacios y tiempos

esparcidos: el de llegar a viejos.

Para lo cual habrás de imaginarte, ya vetusto o provecto

sin negarte a la mano que acaricie una estría

o halle el surco en donde antes sólo estaba el albor.

Preguntarás después por la desdicha,

el revés, el percance, el infortunio artero

que llega birlador sin previo aviso.

Exactamente en este punto se aprueba la segunda

de las fatales pruebas.

Si han de enfrentar unidos esta fiesta invertida,

Leopoldo, te diría que es tuya y tú de ella.

Al fin será la tercia de las auditorías;

la identidad enamorable en ambos,que no admita permutas.

Si te elige entre todos por artista y poeta,

tras la noche de bodas no serás un banquero

que cuenta calderillas.

Si en tu triar exigente la vestiste en Toboso

de Dulcinea argenta,

no la verás jamás Aldonza, no Sanchica, ni has de pedirle oficios

de porquerizas torvas.


-VII-

Alcanzarás la boda como Galaad al Grial,

según cuentas las sagas;

en el rocío de tu juventud, canta el Salterio,

en la hermosura de una santidad que te fue dada

desde el seno bruñido de la aurora.

Sean tus arras la palabra fiel como el aplomo cierto,

la lealtad en el crepúsculo

y la honradez al pernoctar.

Así el templario que hace en pleno día sus batallas intensas

y su guardia a la noche, sin suplencias amables.

Que no te sustituyan en la guardia,

ni los ojos marciales, ni los puños latentes,

ni el pecho respirando

el gallardo licor de la acechanza.


-VIII-

Fíjate que no falten en las Cartas de Arras

el Partenón y el signo que advirtió Constantino

en Puente Milvio,

izando aquel crismón del Cristo Pantocrátor.

Y fíjate asimismo que en su dote,

prenda, fianza, caución o aportaciones,

tengan sitio las aspas de Borgoña, el Rubicón del César,

las torres toledanas del Alcázar

y un eslabón de la cadena osada que en arriscado río

trabó las naves invasoras

un veinte de noviembre en Obligado.

Leopoldo, en el ajuar de la novia elegida,

tiene tanta importancia la mantilla blanca

como el negro pendón que flameara Facundo

entre Los Llanos.


Antonio Caponnetto



11.-Como es sabido, Leopoldo Marechal escribió varias Didácticas. A la Alegría y a la Patria, por ejemplo. 2.-Como es también sabido, es legítimo imitar lo bueno, o al menos intentar inspirarse en las cosas buenas. 3.-Como es sabido asimismo, estas copias o remedos, tienen el propósito de ser tributos u homenajes; no plagios, sino ofrendas.4.-Como es sabido, al fin, nunca segundas o terceras partes fueron buenas, por lo que ni ésta ni otra emulación laudatoria del poeta tendrá el fulgor original irrepetible. Pido perdón por ello. Válgame la intención. 5.-Teniendo tales reglas bien sabidas, me pareció oportuno concluir estas Lecciones Políticamente Incorrectas, con una Didáctica del Hogar, tomando de interlocutor al mismo Leopoldo Marechal, como lo hiciera él involucrando en sus Didácticas a figuras de su entorno amical. 6.-Y termino. Estoy cansado de decir, pero lo seguiré diciendo, que mi admiración poética por Leopoldo Marechal no supone ni supuso nunca adherir al sinfín de sus extravíos, que son del dominio público para quienes conocen su derrotero público y su conducta privada. Pero si a esta altura de la vida, y a pesar de estas diferencias, no pudiera yo reconocer los méritos de un aristócrata del idioma castellano, e intentar siquiera un ínfimo agasajo a su talento notable y sus clarividentes intuiciones, en vano habrían pasado los años sobre mis hombros y mis pies.



domingo, 5 de enero de 2025

ABRAMOS LOS TESOROS - Antonio Caponnetto

 

“…Y he aquí que la estrella, que habían visto en el Oriente, iba delante de ellos, hasta que llegando se detuvo encima del lugar donde estaba el niño […]. Luego abrieron sus tesoros y le ofrecieron sus dones: oro, incienso y mirra” (San Mateo, 2, 9-11).


No fue fácil el viaje, la andanza era riesgosa,

por alcorces de nieve, por prados con estigmas,

los vigías de Herodes merodeando la marcha,

y una mezcla de pálpitos, incógnitas y enigmas.

 

Difícil andadura, cargando lejanías,

presintiendo la gloria de un Rey Amanecido,

el júbilo inefable del misterio primero

encarnado en un Niño, expectante y dormido.

 

Sin embargo la gracia de una estrella anfitriona,

como un candil celeste o una llama lumínica,

les marcaba la ruta inaugurando advientos

de aquella intemporal y festiva domínica.

 

Llegados al pesebre, un regocijo grande

en una gran manera, según cuenta Mateo

extasió a los viajeros, veteranos en magia,

partió el silencio un ángel con su fiel aleteo.

 

A solas en la augusta soledad del establo,

bendita epifanía, monástica clausura,

los regios visitantes cuartearon sus alforjas

entregando sus prendas con viril donosura.

 

Que era Dios cuan monarca y a la vez era humano,

omnipotencia entera y a la par indefenso,

cifraron sus obsequios la betlemita noche:

la mirra, el oro puro y el aromado incienso.

 

¿Qué daremos nosotros sin caudales ni acervos,

despojados del Credo, del ritual, de varones

portadores de mitras, jerarcas de la Fiera,

devenidos en lobos, pertinaces felones?

 

Te llevamos, Señor, lo que nadie nos quita,

la sangre de los mártires que jamás se coagula

este anhelo de verte, así el mar a la roca,

la patria que nos diste: la que no capitula.

 

Te llevamos la ciencia de los Padres, la Summa,

las Actas de Nicea, el valor de Atanasio,

la parresía invicta de aquellos perseguidos,

los laudes tempraneros, el ocre iconostasio.

 

Te llevamos las cruces, el pendón oriflama,

las aspas jacobeas, el honor de un cruzado

la Fe del carbonero con la sacra sapiencia,

¡Abramos los tesoros, el Logos se ha encarnado!

 

Antonio Caponnetto



sábado, 14 de diciembre de 2024

Los Reyes y el Rey - por Antonio Caponnetto

 

Los Reyes y el Rey


“La primera acción que muestra la reverencia de los Magos 
hacia el Niño es la adoración, la segunda es la ofrenda, 
la tercera la obediencia a la palabra recibida”.

Santo Tomás de Aquino,

Comentario al Evangelio de San Mateo.

 

Hay un cuadrante que la estrella alumbra

y en Belén desemboca mansamente,

eran tres peregrinos y un riente

corazón que vencía la penumbra.

 

Las ofrendas no fueron lo primero

esa noche cabal de epifanía,

el incienso su turno aguardaría

con la mirra y el oro argentifero.

 

Al principio fue entrar, ver y postrarse,

trocarse en agasajo personal,

testigos de esa piedra primordial

y en la Casa del Pan anonadarse.

 

‘Es tu mano que todo lo engrandece’,

rezaron con Miqueas, el profeta,

después la tierra se volvió glorieta:

Es el Rey el que todo lo embellece.

 

Una alegría nueva han conocido,

los pastores, boyeros o rebaños,

un jubileo que en los aledaños

entonó el canto etéreo y bendecido.

 

Señor, hiciste grande el aleluya,

lo anticipó la boca de Isaías

y bienaventurado aquél, dirá Tobías,

que en tu paz su camino reconstruya.

 

Esos Magos, Jesús, son las primicias

de las naciones que de lejos llegan,

te adoran, te obedecen, se te entregan.

Y Tú, el Encontradizo, las auspicias.

 

¡Ay de tí, Nazareth! ¡Ay pago nuestro!

sin Magos, sin lucero, sin pesebre,

sin capellán que al Buen Amor celebre

y clavada de espinas un cabestro.

 

‘Vendrán a tí de lejos, numerosos’

los pueblos de los que eres el presagio,

la Barca saldrá a flote en el naufragio

de los amotinados alevosos.

 

Los Herodes te buscan, su apariencia

más que regia semeja a los lacayos.

Prometemos, Señor, ser tus vasallos:

adoración, ofrenda y obediencia.



Por Antonio Caponnetto

 




jueves, 23 de septiembre de 2021

Novedad Editorial: “Torre de Homenajes” de Antonio Caponnetto


En el Medioevo regía entre el lenguaje llano de las gentes de España, la resonante expresión “Torre de Homenaje”. Encandila al alma descifrarla y le remoza brios, aunque esté dormida. Porque la Torre de Homenaje era la más fuerte, la más sólida, la más alta y a más dominante de las atalayas en la que el gobernador o caudillo de una comarca o de un reyno hacía la promesa de custodiarla hasta perder la vida si fuera menester. La poesía, al fin de cuentas, es también una sucesión de homenajes.

 


Índice

Prólogo

Introito

12 de Octubre Acción de gracias a España

A fray Santiago Cantera

A tí Álvar Fañez

Para María Magdalena Fragueiro de Olivera

Dionisio Pamplona

A Francisco Franco: el día que profanaron su tumba

A Blas Piñar

En el centenario de su natalicio

A Oliveira Salazar

Elegía Para Jordán Bruno Genta

A Juan Alfonso Carrizo

Argentum

A la Catedral de Notre Dame

El leño verde

Loor de San Gregorio Magno

Crónica de una epidemia católicamente afrontada

A Polo Román

Habla el ARA San Juan

Enrique Díaz Araujo toma el Cielo por asalto

Alfredo Barros

Respuesta agradecida

De Silvano Acosta a Jorge Luis Borges

A Delicia Giachino

Del Obispo felón y de la Niña fiel

Romance de la Niña María José

Hogarcito Don Orione

La mujer del soldado

A las novias y esposas de todos los que combatieron

en la guerra justa contra el terrorismo marxista

Carta a un amigo

Para resistir la tiranía sanitarista

Protocolos

Un cielo de sexto piso

A la Galería Güemes

Tríptico sobre El Nacimiento de Jesucristo

El Ejército del Cielo

Oración en desagravio al Cristo Yacente

Perfume de Adviento

Para Felicitas Casillo

Lo Indebatible

La que espera

A Magdalena Bosco, mi más pequeña ahijada

Desagravio al Pesebre

I Corintios, 13

Proclamación Pública de la Pascua

Soliloquio pascual de San Pedro

Contra prosaicos

 

 

Queridos amigos:

                                 Acaba de salir un nuevo libro mío, titulado Torre de Homenajes.

                                  Quienes estén interesado en adquirirlo, deberían hacer lo siguiente:

                                 1)Comunicarse con la Librería y Editorial Santiago Apóstol, La Plata 1721, Bella Vista, C.P. 1661, Buenos Aires.

                                 E-mail:santiagoapostol_bellavista@yahoo.com.ar                                      santiagoapostol_libros@yahoo.com.ar

                                  Preguntar por Marcelo Gristelli. Facebook.com/marcelo.gristelli.7

                                  2)Hay, como siempre, algunas librerías amigas que seguramente tendrán también el libro a la venta. Enuncio:

                                 -Club del Libro Cívico: Marcelo Torcuato de Alvear 1348. Local 147.  TE:  011 4813-6780. CABA.

                                  -Librería y Editorial Vórtice: Hipólito Yrigoyen 1970. CABA. TE:  011 4952-8383.

                                     -Librería Acción: Solís 282. CABA. TE:  011 4382-2798

                                    Les agradecería mucho si comparten este aviso y lo hacen circular. No existe, al menos para mí, otro modo más que este de dar a conocer un libro.

                                     Un abrazo

                                      En Cristo y en la Patria

                                      Antonio Caponnetto



martes, 2 de febrero de 2021

Protocolos - Antonio Caponnetto

 



“¡Pues no faltaba más! Yo digo lo que Santo Domingo de Silos contestó a un rey castellano: <Señor, la vida podéis quitarme, pero más no podéis>. Y es preferible morir con honra que vivir con vilipendio”

                                                                          José Calvo Sotelo


-      I -

 

Para empezar ordeno que los curas,

los clérigos, obispos y mitrados

convoquen a rezar, arrodillados,

con grandes cruces por arboladuras.

 

 Capellanías haya de aventuras

en los templos, las calles, los poblados,

ganen  la liza los Enamorados

derrótense el temor, las amarguras.

 

Violineros, bombistos, citaristas,

cantores de himnos, marchas o epinicios

sean del miedo los antagonistas.

 

Nuestro <Reinicio> se arme en las troneras

para ahuyentar de allí los maleficios.

¡Ordeno que las casas sean trincheras!

 

-II-

 

Queda prohibido mantener distancia

del aquejado, del fatal paciente,

del prójimo que aún convaleciente

no pide poquedad sino abundancia.

 

Y si se trata de guardar la infancia,

de no malear su frágil recipiente,

te acercarás confiado y sonriente

a darle, de las ciencias, la más rancia.

 

Cuida tu vida centinela austero,

por eso mismo piérdela mil veces

que para esto Dios te ha dado el cuero.

 

Levanta la cabeza , el mal soterra,

que no exista lugar para dobleces.

Queda prohibido ser felón si hay guerra.

 

 

 

 

 

-      III -

Decreto amancer cantando Salmos

y estrechando la mano a los vecinos,

la cara libre abierta a los caminos,

al aire aldeano y a los vientos calmos.

 

Colocar en los potros los enjalmos

corriéndoles carreras a los pinos,

vendimiar los parrales, los racimos;

desanudarle al agua los escalmos.

 

Decreto procesiones, ya me alisto,

cuarenta noches de vigilia orante,

promesas a la Virgen del Rocío.

 

Abrazar al que sufre de hambre o frío,

ser otro loco caballero andante.

Y decreto morir vivando a Cristo.


Por Antonio Caponnetto